AUTOPSIA
La palabra autopsia proviene del griego antiguo "autopsía" (αὐτοψία), que se compone de:
"autós" (αὐτός) = "uno mismo"
"ópsis" (ὄψις) = "vista", "visión", "mirar"
Es decir, "ver por uno mismo" o "ver con los propios ojos".
Informe de autopsia emocional
Nombre del sujeto: Alexia Mercado Rodríguez
Género: Femenino
Edad: 30 años
Caso: Colapso afectivo agudo
Estado: Viva por poco tiempo
Fecha del evento:
9 de julio de 2025
Tarde nublada, temperatura templada.
Ubicación: Habitación en penumbra, sin intervención externa.
Condiciones: Fatiga persistente, episodio de desregulación emocional severa, taquicardia, anhedonia total, ansiedad aguda
Hecho principal:
El sujeto expresó con claridad su deseo de morir.
Se evaluaron diferentes métodos. Se contemplaron las consecuencias prácticas.
Se consideró el efecto en los animales domésticos.
Hubo una pulsión ambigua hacia la permanencia.
El pensamiento fue interrumpido por una acción: el sujeto decidió pedir ayuda.
Hallazgo central: En el interior del estómago emocional, envuelto en papel húmedo, se encontró un fragmento de diario personal.
"Decidí escribirles. No grité. Solo dije lo que sentía. Quise morir. Les dije que me estaba deshaciendo. Les conté que pensaba en ir a la Sierra o pintar. Que no quería seguir. Ingenuamente pensé que me lanzarían un salvavidas…”
Contenido del hallazgo (extracto literal):
Fragmento transcrito del diario interno.
Todas las respuestas fueron encontradas en una misma página.
Sin análisis. Sin anotaciones posteriores.
Simplemente estaban ahí.
— “¿Pintar qué? ¿Cómo?”
— “¿Cuándo?”
— “¿Me estás confirmando que no se hará nada?”
— “Me confundieron.”
— “No puedo decir nada.”
— “Nadie cree que estés exagerando.”
— “Tus sentimientos son importantes.”
— “¿Por qué sientes que estamos desvalidando tu sentir? Necesito saber más.”
Causa de muerte emocional:
Ausencia.
EPÍLOGO
Después de escribir esto fríamente, llegué a esta conclusión.
Para quienes han estado en esa habitación, para quienes han gritado con todo el cuerpo y, a cambio, recibieron un excelente diálogo de cuestionamientos: no puedo prometerles que hay un mejor consuelo ante eso.
Replanteé en diferentes escenarios mi muerte, como tantas veces lo he hecho. Pero la angustia es un elemento que aún no me permite ir a la fase final del suicidio.
Incluso dentro del desborde hay un punto de inflexión. Un momento casi imperceptible donde notas que estás solo, y que si sales, será por ti. No hablo de “ganas de vivir”. No es eso. Es otra cosa. Algo más crudo. Más callado.
No hay palabras alentadoras sobre este tema.
No hay solución anticipada.
No hay final esperanzador garantizado.
Lo que yo encuentro, cada vez que estoy ahí, es poesía.
Poesía cuando los personajes que estimo reaccionan con incapacidad, pero ostentan la misma demanda para mí.
Poesía en esas palabras que envuelven una frialdad elegante.
Poesía en el vacío que dejan, porque el vacío también tiene forma. Y a veces, ritmo.
Este texto no busca consuelo. Es solo una hoja arrancada de un cuaderno lleno de polvo que dejé en mi buró.
Una hoja donde sobrevivo.